
movimientos a veces de manera impresionante, hasta que puede ser difícil pararlos. Por otra parte, cuando entra en la pista un equipo de Finanzas, los caballos están con las cabezas más bajas y puede ser más difícil moverlos. Con razón es común escuchar que estas dos áreas tienen conflictos, y generalmente es por la diferencia de ritmos y tiempos que por obvias razones varían, y que en los caballos es muy fácil observar. Aún así, estas diferencias parecieran entenderse mucho mejor cuando se miran a través de la manada de caballos que entre las personas. Este es un patrón que vemos suceder casi con cada perfil. Por supuesto, Recursos Humanos generalmente tiene mucho mas contacto con los caballos, a diferencia de otras áreas. En nuestra pista hemos observado también otro tipo de diferencias. Generalmente los equipos que llegan a mover a todos los caballos, desde el más grande hasta el más chico, y que en general pueden lidiar con un amplio rango de diferentes conductas de los caballos, son equipos que tienen gran capacidad de movimiento en diferentes áreas, es decir, son equipos muy completos en sus individualidades y en su operación. Equipos como Wal-mart, Heineken, Shell, Banco de México, Danone, Atento, entre otros, muestran un manejo de los caballos, y de sus recursos como equipo, de manera impresionante a pesar de no tener experiencia con caballos. Hemos tenido la oportunidad de observar equipos que tienen grandes recursos, que logran armar estructuras increíbles en la pista, pero los caballos no se mueven.
Por otro lado, hay equipos que tienen una gran capacidad de movimiento, que logran mover fácilmente a los caballos, pero donde falta estructura y dirección. Todo esto nos brinda gran información del grupo corporativo en la pista y de la empresa que representa. Hay empresas muy nuevas que requerirán gente que mueva fervientemente a los caballos en un inicio, y empresas que necesitan gente con estructura y dirección clara, todo dependerá del tipo de empresa y en el momento en el que se encuentre. La manada de caballos también nos mostrará el tacto que tienen los grupos, y los individuos que lo conforman. Las reacciones de la manada a cada grupo son diferentes, y muchas veces nos llegamos a sorprender de cómo los caballos se pueden llegar a comportar de maneras tan diversas con personas tan diferentes. Un caballo reacciona totalmente diferente de una persona a otra, habrá personas que puedan llegar al contacto, e inclusive hasta moverlos con dirección, mientras que otros no lleguen ni a dos metros del mismo caballo. Una vez más aquí es muy obvio encontrar diferentes fortalezas de manera inmediata, mientras que en la oficina pareciera más difícil de identificar.La realidad es que uno de los grandes beneficios de este modelo de trabajo es que nos brinda una auto consciencia casi inmediata, y que pocos escenarios pueden brindarnos.

Los caballos nos brindan un escenario seguro emocionalmente para generar autoconsciencia individual y grupal. La autoconsciencia es la base para desarrollar el resto de las habilidades necesarias para la inteligencia emocional, indispensable en líderes de alto nivel y con mucha gente a su cargo, además pagada en miles de dólares para su desarrollo y entrenamiento en el área empresarial a nivel mundial.Otro beneficio es que nos permite ver en el exterior lo que “yo y mi equipo” causamos e impactamos en el exterior, es decir en otros, y en la misma organización. Generalmente cuando preguntamos: ¿qué creen que los caballos percibieron de su equipo? Tiene un reflejo directo con lo que la organización está percibiendo de ese grupo. Cuando Directivos y Recursos Humanos observan nuestros resultados, se admiran de cómo los caballos muestran lo que realmente sucede en la organización, pero más de cómo los equipos son capaces de percibirlo y trabajarlo con mucho más facilidad.
Un paralelo que encontramos curioso para compartir, es que los caballos han sido uno de los animales que han logrado permanecer a lo largo de la historia porque han sido capaces de adaptarse y permanecer unidos, de igual manera, dos de los temas para los que hemos sido contratados más, han sido: trabajo en equipo y adaptación al cambio. Creo que nada de esto es casualidad. Justo ayer trabajando con un ejecutivo decía: “es que el caballo no es como un perro que le dices ven y viene, es una relación que tienes que trabajar”.
Creo fervientemente que una de las misiones del caballo es ponernos a trabajar. El caballo ha trabajado para el ser humano casi desde nuestros inicios, pero nunca nos imaginamos que ellos nos iban a poner a trabajar a nosotros, y mucho menos, en lo que respecta a nuestra parte interna, pero mucho menos aún…en el trabajo dentro las empresas, organizaciones y altos niveles ejecutivos. Por algo personas como Winston Churchill lo han reconocido: “Hay algo en el exterior de un caballo que es bueno para el interior del ser humano”.